Die Historie der Patentanwaltskanzlei HOFFMANN EITLE
Historia

Un bufete de propiedad industrial e intelectual con solera

La historia de HOFFMANN EITLE se remonta a la época imperial en Alemania, una de las más extensas  dentro de los bufetes especialidos en propiedad industrial e intelectual. Llevamos desde 1892 asesorando y representando a nuestros clientes en materia de propiedad industrial e intelectual. Desde nuestra fundación, nos han confiado más de 200.000 inventos, grandes y pequeños.

Berlín (desde 1892)

Nuestra primera oficina fue inaugurada en Berlín en 1892 por el ingeniero civil Emil Hoffmann, de 37 años, en la calle Wilhelmstrasse 52. Coincidió con una época de rápido desarrollo técnico no sólo en Alemania sino también en todo el mundo: en 1893 se inventa el motor diesel, en 1894 la primera vacuna contra la difteria, en 1895 el primer aparato de rayos X y a finales de la década de 1890 el primer telégrafo sin hilos (el primer aparato de radio).

Era el momento ideal para fundar un bufete de abogados especializado en propiedad industrial e intelectual: la Oficina Imperial de Patentes había abierto sus puertas en Berlín en 1877 y ya se estaban produciendo los primeros litigios por inventos como el motor de gasolina o los tintes químicos como el azul de metileno y el rojo Congo. Los inventos tenían una enorme importancia social. Se crearon asociaciones de inventores, asociaciones de propiedad industrial e incluso una asociación de empleados de propiedad industrial. En 1900, los requisitos de formación y admisión de los abogados de propiedad industrialse se normalizaron mediante las primeras normas de conducta de los abogados de propiedad industrial. Ese mismo año, Emil Hoffmann fue inscrito en la recién creada lista oficial como uno de los primeros abogados de propiedad industrial de Alemania.

Una empresa familiar

En enero de 1925, el hijo de Emil, Erich, doctor en química, se incorporó a la empresa. El bufete ya tenía clientes en Estados Unidos y asesoraba a grandes empresas estadounidenses como Coca Cola Company, United Chromium Inc. e Intercontinental Service Corp. Principalmente, el bufete se ocupaba de las invenciones de pequeñas y medianas empresas.

Ein altes Dokument von HOFFMANN EITLE
Tiempos difíciles

1944 arrastró al bufete Hoffmann al borde de la ruina. Berlín fue bombardeada incesantemente. El fundador de la empresa, Emil Hoffmann, falleció en un accidente a la edad de 89 años. Y el despacho con la mayor parte de los archivos y documentos de los primeros cincuenta años de existencia de la empresa quedó destruido cuando la oficina de la Friedrichstrasse de Berlín fue completamente arrasada por bombas incendiarias.

Ein altes Kassenbuch von HOFFMANN EITLE

Múnich (desde 1945)

Erich Hoffmann y su familia huyen de un Berlín destruido y cercado por el Ejército Rojo a Turingia. Su excelente inglés y su falta de antecedentes nacionalsocialistas hicieron que Erich encontrara trabajo para un comandante estadounidense. Surgió una amistad que le allanó el camino para marcharse a Baviera poco antes de la invasión del ejército soviético. Y así, la familia llegó a un Múnich fuertemente bombardeado. Erich Hoffmann volvió a establecer la empresa en su apartamento privado de la calle Widenmeyerstrasse 34. El mobiliario de su oficina consistía únicamente en una estufa de carbón con muy poco uso, una mesa, una silla y una máquina de escribir Underwood que ya había sido desechada. Sin embargo, con el tiempo, Erich pudo volver a conectar con sus clientes y reconstruir la empresa.

Al final de la Segunda Guerra Mundial, la Oficina de Patentes del Reich alemán en Berlín cerró sus puertas. Como se encontraba en Berlín Este y todos los documentos estaban también almacenados en la zona Este que estaba bajo el control soviético, hubo que empezar de cero en la zona de ocupación occidental.

A partir de 1946, Erich Hoffmann dirigió el Colegio de Abogados de la Propiedad Industrial de la posguerra en Múnich y trabajó duro para ayudar a establecer la Oficina Alemana de Patentes, que reabrió sus puertas en Múnich en 1949, muy cerca de la casa de Hoffmann. La oficina de patentes se instaló temporalmente en el Deutsches Museum debido a su amplia biblioteca técnica, a la par que se iniciaban las obras de construcción de un nuevo edificio en la orilla opuesta del río Isar.

En 1960, Werner Eitle, también ingeniero, se convirtió en socio de la empresa. Cinco años después, Klaus Hoffmann, nieto del fundador, se convirtió también en socio.

Con el paso de los años, se hizo cada vez más evidente lo ideal que era y sigue siendo Múnich como sede de un bufete de abogados especializado en propiedad industrial: Múnich se convirtió en la sede permanente de la Oficina Alemana de Patentes, seguida más tarde por el Tribunal Federal de Patentes en 1961 y la Oficina Europea de Patentes en 1977. Año tras año, la empresa crecía sin cesar y en 1969 se trasladó su sede al edificio BayWa, en el recién construido barrio de Arabella Park de Múnich. A principios de los años setenta, Klaus Hoffmann, junto con la siguiente generación de socios, entre los que se encontraban Bernd Hansen, Klaus Füchsle y Werner Lehn, trabajaron duramente para expandir el negocio de la empresa, en particular en Japón. En Japón, por aquel entonces, el derecho de patentes de la lejana Europa era sinónimo de HOFFMANN EITLE. Las valiosas relaciones comerciales que se establecieron con empresas y bufetes de abogados japoneses siguen siendo, a día de hoy, un pilar importante de nuestro éxito. En 1976, Alexander Nette se incorporó al bufete como su primer abogado y dirigió el departamento de marcas. A principios de los años 90, el abogado Guntram Rahn fundó el departamento de litigios de HOFFMANN EITLE.

Europa (desde 1987)

En 1987, HOFFMANN EITLE decidió dar un paso más y expandirse en Europa. Abrió su primera sucursal en Londres, que hoy en día es uno de los principales bufetes británicos de abogados especializados en propiedad industrial e intelectual. Tras el éxito de la oficina de Londres, se abrieron nuevas oficinas en otras ciudades europeas: Milán (2009), Hamburgo y Düsseldorf (2012), Madrid (2013), Ámsterdam (2018) y Barcelona (2021). En estas sedes se incorporaron abogados de la propiedad industrial de muchos otros países europeos, como Bélgica, Bulgaria, Dinamarca, Francia, Irlanda y Austria, así como de países no europeos, como Estados Unidos, Japón y China. En la actualidad, en HOFFMANN EITLE se hablan más de 20 idiomas y las principales lenguas de trabajo son el inglés y el alemán.

Traslado de la sede principal

En 2014, la sede principal del bufete se trasladó al ultramoderno edificio Arabeska, en el barrio muniqués de Bogenhausen.

En la actualidad, más de 130 abogados y agentes de la propiedad industrial con titulación europea y/o nacional, así como más de 40 abogados en prácticas con titulación técnica o científica más otros 300 empleados cualificados trabajan diligentemente para nuestros clientes.

Der Eingang von HOFFMANN EITLE am Hauptsitz in München
Reunirnos

La historia de HOFFMANN EITLE es la de un crecimiento constante, transformándose de una pequeña empresa familiar a uno de los bufetes de propiedad industrial e intelectual más grande, reconocido y respetado internacionalmente de Europa. Este crecimiento ha sido posible, sobre todo, gracias a una inquebrantable filosofía de calidad y a un compromiso con la diversidad y la internacionalidad, valores que le han valido a HOFFMANN EITLE la confianza de numerosos clientes de todo el mundo.

Eine Übersicht der  Standorte der Patentanwaltskanzlei HOFFMANN EITLE